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El poder de la hipnosis en terapia
En el último artículo que escribí sobre «Qué es el coaching« comenté que hablaría acerca de la hipnosis como herramienta para el cambio. Quiero explicaros cuál es el poder de la hipnosis en terapia.
Estamos acostumbrados a asociar la palabra hipnosis con conceptos a veces esotéricos o mágicos, que nos lleva a tener una actitud escéptica. Si es verdad que la hipnosis es una disciplina utilizada para hacer espectáculos de magia, en los que el hipnotista tiene un poder completo sobre la persona hipnotizada, sin embargo, la hipnosis es una herramienta muy útil y eficaz en la terapia.
Los dos tipos de hipnosis: la teatral y la terapéutica. Se diferencian la una de la otra por la finalidad con la que se practica.
1. Hipnosis teatral:
Es una forma de espectáculo, de entretenimiento para el público.
2. Hipnosis terapéutica:
Es una forma de terapia. El poder de la hipnosis en terapia es incuestionable.
Ambas también tienen una cosa en común: en ningún caso el hipnotista o el terapeuta tienen ningún poder o control sobre la voluntad de la persona hipnotizada, que es consciente en todo momento.
En el artículo de hoy me gustaría hablarte de qué es y de cómo funciona una de ellas, la hipnosis terapéutica, y de cuál es el poder de la hipnosis en terapia, cómo puede ayudar a mucha gente a solucionar problemas que no consigue hacer de una forma consciente y racional.
¿Qué es la hipnosis?
Cuando empecé a formarme en Hipnosis Ericksoniana mi maestra, Teresa García, del Instituto Milton Erickson de Madrid, me explicó lo que ahora quiero compartir contigo. Todos sabemos que existen varios estados o niveles del sueño, asociados a una específica actividad cerebral (sueño profundo, REM, etc.) De la misma manera existen varios estadios de vigilia, especialmente dos: uno en que los procesos mentales conscientes e inconscientes están asociados y otro en que se disocian. ¿Qué significa esto?
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Los procesos mentales conscientes e inconscientes están asociados.
Representa el estado de vigilia más común, que nos acompaña durante la mayoría de las actividades del día. En este estado nuestra atención consciente crea un verdadero filtro a través del cual cualquier orden, consejo, idea o sugestión vienen minuciosamente analizados a través de la lupa de la racionalidad. Es como si tuviéramos un mecanismo de defensa constantemente activado. De esta manera todo lo que nos dicen, por bien que nos venga, choca contra este muro y la información viene manipulada por nuestras creencias, miedos, valores.
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Lo consciente e inconsciente están disociados.
Está caracterizado por una disociación entre nuestra parte consciente e inconsciente. Este estado es el que llamamos trance hipnótico y en que nuestra atención consciente se focaliza en un punto. Al hacerlo se crea un espacio, un pasaje a través del que todo tipo de mensaje puede llegar directamente a nuestra parte inconsciente, sin manipulación ni filtros. Durante el trance hipnótico la persona entra en un estado de relajación muy profunda en el que va escuchando la voz del terapeuta y los mensajes (metáforas, cuentos, sugestiones, anécdotas) que utiliza para guiar su inconsciente hacia los recursos que necesita para solucionar su problema.
El trance hipnótico
El trance hipnótico no es nada más que un estado natural de nuestra mente y todos lo experimentamos, sin saberlo, muchas veces a lo largo del día. Te pondré un ejemplo: ¿Te ha pasado alguna vez conducir el coche, llegar a tu destino y darte cuenta de repente que no has sido consciente de ello? Es como si hubieras puesto en marcha un piloto automático a la hora de conducir. Al hacerlo, tu mente se ha disociado del acto práctico de conducir y se ha conectado con tu mundo interior, con tus emociones e ideas. Si te ha pasado, tú también has experimentado un trance hipnótico.
Las más recientes investigaciones han revelado que cuando estamos hipnotizados pasa algo muy interesante a nivel neuronal: Nuestra mente no es capaz de distinguir si lo que “visualiza” durante la hipnosis es real o no. Te pongo otro ejemplo muy sencillo:
Si durante la hipnosis estoy me visualizando a mí misma andando se activarán las mismas neuronas de si estuviera andando de verdad. Si me imagino a mí misma andando en un estado normal (no bajo hipnosis) se activan otras neuronas, las relacionadas con la imaginación y la creatividad. Es decir, durante el trance hipnótico la mente llega a vivir realmente una experiencia. Este descubrimiento nos explica aún más claramente porque la hipnosis puede ser muy eficaz para reencuadrar sucesos del pasado y construir recursos personales para el presente y el futuro.
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